IzarLink es miembro de la AOTA (Asociación de Operadores de Telecomunicaciones Alternativos).

Association des Opérateurs Télécoms Alternatifs

Fundada en marzo de 2017, la asociación AOTA pretende apoyar el desarrollo de operadores alternativos en el mercado francés de las telecomunicaciones. Actualmente reúne a unos cincuenta operadores comerciales regionales (OCER).

Gracias a la diversidad de sus servicios, su escala humana, su enfoque de proximidad y su oferta dirigida, los operadores de telecomunicaciones alternativos son actores comerciales de derecho privado esenciales para el desarrollo digital y económico de los territorios. Llevan más de 20 años en el corazón del mercado francés de las telecomunicaciones, junto a los operadores comerciales nacionales (OCEN).

Los miembros de AOTA también poseen su propio núcleo de red alojado en centros de datos de alto rendimiento, tienen interconexiones con al menos dos operadores de infraestructura (Orange, SFR y varias redes de iniciativa pública) y, para algunos, poseen un bucle local óptico dedicado (BLOD) destinado al mercado empresarial o un bucle local óptico compartido (BLOM) activado o diseñado en estricto cumplimiento de las normas establecidas por ARCEP. De este modo, participan a nivel local o regional en la competencia basada en las infraestructuras que exige la normativa francesa sobre telecomunicaciones.

Desde su creación, la AOTA ha abogado por un mercado de las telecomunicaciones abierto, diversificado y dinámico. En colaboración con la autoridad reguladora francesa de las comunicaciones electrónicas y los correos (ARCEP), el Ministerio de Economía, Finanzas e Industria, el Parlamento y las autoridades regionales y europeas, nuestra asociación desea actuar en favor de una normativa que garantice el desarrollo de los operadores alternativos favoreciendo, por ejemplo, su acceso a las infraestructuras de los operadores dominantes en condiciones técnicas, jurídicas y económicas coherentes.

Las empresas miembros de la AOTA trabajan juntas para responder a los nuevos retos económicos, tecnológicos y legislativos a los que se enfrentan para mantener su lugar en el mercado francés de las telecomunicaciones y participar en la transformación digital de las empresas, las instituciones públicas y el público en general.